Características principales:
La brillantez, imaginación y calidad alcanzadas por la pintura durante el siglo XIX no tuvieron paralelo en el caso de la escultura, a pesar de que, sobre todo a partir de 1850, los escultores se esforzará en obtener efectos de luces y sombras a través del tratamiento de las superficies, tanto de piedra como de metal o arcilla, intentando conseguir un ilusionismo similar al pictórico.
La llegada del Realismo supone una renovación de la escultura en cuanto a forma y contenido, si bien habrá que esperar hasta finales de siglo para que se materialice su deslinde definitivo de la pintura y se manifieste con un lenguaje nuevo y autónomo.
Hasta entonces, la escultura estaba mediatizada por su querencia a los modelos del pasado y por su vinculación a intereses políticos y propagandísticos. De este modo, su realización se veía limitada a la exaltación de personajes ilustres, de héroes militares, de relevantes políticos y de significados literatos o artistas, lo que propiciaba la proliferación de monumentos conmemorativos y de homenaje. Unos monumentos que cumplían tanto una función didáctica y ejemplarizante como un fin decorativo, y cuya ubicación respondía a programas urbanísticos y embellecedores de las ciudades.
Asimismo, la escultura florecerá, con concesiones a la fantasía y a la evocación sentimental, en los monumentos funerarios, cuya importancia se vería multiplicada por la creación de grandes cementerios en el extrarradio de las ciudades, fruto, a su vez, del desarrollo de la moda del culto a los muertos. La Escultura parece sufrir una dificultad mayor para evolucionar aunque seguirá a la pintura de cerca… y tratará temas “románticos” en formato “clásico”. • Los comienzos del siglo XIX continuaron en escultura el estilo neoclásico que Thorwaldsen y Canova habían cultivado desde finales del XVIII. • Y es que los modelos clásicos eran más abundantes en la Escultura que en la Pintura.
Auguste Rodin:
(París, 1840-Meudon, Francia, 1917) Escultor francés. Fue alumno de Jean-Baptiste Carpeaux en la Escuela de Artes Decorativas y de Antoine-Louis Barye en el Museo de Historia Natural, dos escultores a los que admiró y en quienes se inspiró en cierta medida. Por sus modestos orígenes, se vio obligado a ganarse la vida como ayudante de decoración, compaginando el trabajo profesional con su dedicación a la escultura.Rodin era un creador sin parangón, un trabajador acérrimo. Tras sus inicios en la "Pequeña Escuela", trabaja en el taller del ornamentista Albert-Ernest Carrier-Belleuse, en París y posteriormente en Bruselas, donde demuestra una gran habilidad para los temas decorativos, de espíritu dieciochesco. El descubrimiento de Miguel Ángel, durante un viaje a Italia en 1875-1876, fue determinante para su trabajo posterior. A su vez, Rodin opera una ruptura en la historia de la escultura, abriendo paso al arte del siglo XX, mediante la introducción en su obra de procesos técnicos y opciones plásticas que se encuentran en el centro de su estética.El denominador común es la visión trágica de la condición humana, las pasiones, los deseos y los tormentos.
El Museo nunca fue construido y la entrada nunca acabada, pero las Puertas del Infierno fueron el origen para muchas de las obras posteriores de Rodin, como El Pensador o El Beso. Al margen, realizaría Los burgueses de Calais y otros encargos como el Balzac.En el último año de su vida, Rodin redujo su actividad y se limitó a paseos cortos cerca de su casa en Meudon.Contrajo una fuerte gripe a fines de 1917 y falleció el 17 de noviembre en su casa. La semana siguiente se celebraron sus funerales a los que asistieron amigos y dignatarios; el cuerpo fue expuesto hasta el 24 de noviembre en el taller de la villa. La obra El Pensador se colocó encima de su tumba así como lo dispuso el artista. No se realizaron homenajes nacionales debido a la guerra.
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Ádan |
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El Beso |
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El Caminante |
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El Pensador |
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Eva |
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